El tercio medio del rostro cumple un papel decisivo en la percepción de juventud y equilibrio facial. Con el paso del tiempo, la pérdida de volumen malar y la migración de los compartimentos grasos generan una apariencia aplanada que puede acentuar surcos nasogenianos y ojeras. El aumento de pómulos con ácido hialurónico se ha consolidado como la opción mínimamente invasiva más efectiva para restaurar ese soporte estructural, evitando los riesgos y el tiempo de recuperación asociados a los injertos grasos o a las prótesis sólidas.

Fundamentos anatómicos y selección del filler

El pómulo está compuesto por varios compartimentos: malar subcutáneo, pre-malar y el complejo SOOF (sub-orbicularis oculi fat). Cada uno envejece de forma distinta. En la consulta realizamos un mapeo 3D que identifica las áreas prioritarias y la densidad de tejido blando residual. Utilizamos ácidos hialurónicos de alta cohesividad, con reología específica (G’ ≥ 200 Pa) para garantizar proyección vertical y mínima migración. Esta selección permite definir el contorno malar con 1,0-1,5 ml por lado en la mayoría de los casos.

Protocolo de aplicación paso a paso

  1. Marcación estratégica Se trazan puntos de referencia en arco cigomático, eminencia y pilar lateral.
  2. Anestesia local Infiltración con lidocaína 2 % para confort total.
  3. Cánula versus aguja En planos subSMAS se prefiere cánula de 22 G para reducir hematomas; en soporte óseo puntual se usa aguja de 27 G para mayor precisión.
  4. Técnica de microbolos y abanico Permite una distribución homogénea y control de la proyección.
  5. Moldeado y control vascular Tras la inyección, se comprueba integridad de perfusión con test de retorno capilar.

Seguridad y seguimiento

El ácido hialurónico es reabsorbible y reversible (hialuronidasa on-site), lo que añade una capa extra de seguridad. El riesgo de oclusión vascular se minimiza mediante aspiración inversa y uso de cánulas romas. El paciente retoma su actividad habitual en 24 horas, observándose un leve edema que cede en 48-72 h.

Sinergia con tratamientos complementarios

Para resultados globales, combinamos el aumento malar con radiofrecuencia fraccionada o láser no ablativo, estimulando colágeno y mejorando la calidad dérmica del tercio medio. Asimismo, ajustes leves de toxina botulínica en cigomático mayor optimizan la sonrisa y prolongan la proyección.

Marbella como hub de excelencia estética

La Costa del Sol alberga centros punteros que comparten nuestra filosofía de precisión y naturalidad. La colaboración con la Clínica Estética en Marbella nos permite intercambiar protocolos y participar en ensayos clínicos que avalan la seguridad del ácido hialurónico de última generación. Para los lectores que busquen información específica sobre la técnica, la guía de aumento de pómulos profundiza en dosis, resultados y comparativas entre fillers.

Conclusión

El aumento de pómulos con ácido hialurónico ofrece un balance óptimo entre recuperación rápida y resultados predecibles. Al combinar tecnología de imagen avanzada, materiales de alta calidad y la destreza quirúrgica, logramos restaurar la arquitectura facial con la máxima seguridad clínica. Solicita tu evaluación personalizada y descubre cómo un tercio medio bien definido puede transformar la armonía de tu rostro.